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ACCIONES DE ENTEL: DESEMPEÑO 2025 EN CHILE, DRIVERS, HITOS Y RIESGOS

Revisa el desempeño esperado de Entel en 2025, factores clave que lo influencian y proyecciones para 2026.

Análisis del desempeño esperado de Entel en 2025

Entel, una de las principales empresas de telecomunicaciones en Chile, ha demostrado ser un actor relevante en el mercado bursátil local a lo largo de los años. Con una historia sólida y una presencia establecida tanto en Chile como en Perú, las expectativas para sus acciones en 2025 son objeto de atención entre inversionistas institucionales y particulares por igual.

En 2025, el desempeño bursátil de Entel estará fuertemente influenciado por varios factores estructurales y coyunturales. Entre los más destacados, se encuentra la evolución en la adopción del 5G, la gestión de costos operacionales, la recuperación del consumo luego de los choques inflacionarios de años anteriores y el comportamiento del tipo de cambio entre el peso chileno y el dólar estadounidense, dado el endeudamiento externo de la compañía.

Durante los últimos años, Entel ha enfocado sus esfuerzos en mejorar la rentabilidad mediante la digitalización de sus procesos internos, la expansión de servicios digitales y la consolidación de su cobertura móvil. Este camino de transformación digital será clave en 2025 para sostener márgenes diferenciadores frente a competidores como Claro, WOM y Movistar.

En términos financieros, los siguientes indicadores serán determinantes para valorar su desempeño en 2025:

  • Ingresos consolidados: Se espera un crecimiento moderado gracias al aumento de clientes pospago y servicios empresariales.
  • EBITDA: Un foco estratégico de la compañía es mantener un EBITDA sobre el 35% a través de eficiencias operativas y reducción de pasivos financieros.
  • Free Cash Flow: La capacidad de generar caja libre será crucial para satisfacer las obligaciones financieras y posibilitar nuevos proyectos.
  • Dividendos: Históricamente, Entel ha mantenido una política de dividendos estable, lo cual podría seguir atrayendo a inversionistas en busca de ingresos pasivos.

El desempeño de la acción en la Bolsa de Santiago también puede depender del contexto macroeconómico local. Una política monetaria más expansiva del Banco Central podría beneficiar el consumo y, por ende, las ventas de servicios móviles y de internet. Asimismo, el nivel de inversión pública en infraestructura digital será relevante, dado que podría facilitar la adopción de nuevas tecnologías por parte de los usuarios.

En 2024, Entel completó la integración de su plataforma de servicios OTT (over-the-top) y avanzó en convenios para alianzas tecnológicas. Las sinergias derivadas de estos acuerdos deberán comenzar a reflejarse en los balances de 2025 para incentivar la confianza del mercado.

En resumen, el desempeño de Entel en 2025 probablemente será estable con potencial de crecimiento moderado, siempre que mantenga su eficiencia financiera, continúe invirtiendo en tecnología y se adapte ágilmente a la demanda cambiante del mercado chileno.

Principales drivers y riesgos en 2025

La evolución de las acciones de Entel en 2025 dependerá de una serie de factores que actúan como impulsores ("drivers") de su rendimiento financiero y bursátil, así como de potenciales riesgos que podrían desviar el curso esperado. Comprender estos factores permite a los inversionistas evaluar mejor las proyecciones y ajustar sus estrategias de inversión.

Drivers de crecimiento

  • Avance del 5G: La expansión de la red 5G en Chile es uno de los principales catalizadores de crecimiento. Entel ha liderado el proceso desde 2021, y los beneficios económicos de esta inversión deberían consolidarse en 2025 mediante mayores volúmenes de consumo de datos y ofertas empresariales premium.
  • Soluciones digitales empresariales: Entel ha potenciado sus áreas de servicios TI, seguridad digital y soluciones en la nube, especialmente para el segmento corporativo. El crecimiento de esta línea de negocios permitirá diversificar ingresos más allá del segmento móvil tradicional.
  • Reducción de pasivos: La disciplina financiera ha sido una prioridad durante los últimos tres años. La reducción continua de deuda neta posibilita liberar flujo de caja para inversiones y dividendos, incrementando la atracción hacia el papel en renta variable.
  • Alianzas tecnológicas: Entel ha establecido asociaciones con proveedores internacionales de tecnología, incluidos players importantes como Amazon Web Services y Huawei. Estas alianzas permiten acelerar desarrollos que mejoran la competitividad frente a sus rivales.
  • Recuperación del consumo: Un entorno macroeconómico más favorable en 2025 podría mejorar el poder adquisitivo de los hogares, impulsando la contratación de servicios móviles y de internet de mayor valor.

Riesgos que podrían afectar el desempeño

  • Competencia agresiva: La presión de precios de empresas como WOM y operadores virtuales podría limitar el margen de crecimiento, especialmente en el segmento prepago.
  • Riesgos regulatorios: Cambios en la legislación sobre neutralidad de la red, espectro o tarifas reguladas podrían alterar la rentabilidad esperada.
  • Disrupciones tecnológicas: La rápida evolución en inteligencia artificial, internet de las cosas (IoT) y servicios OTT representa tanto una oportunidad como un riesgo si Entel no logra adaptarse con agilidad.
  • Riesgo cambiario: Aunque parte significativa de sus ingresos está en moneda local, la exposición a deuda en dólares y la importación de equipamiento tecnológico mantiene a Entel vulnerable a movimientos bruscos del tipo de cambio.
  • Ralentización económica: Si el crecimiento del PIB chileno es menor al proyectado, podría disminuir la demanda por nuevos servicios, afectando las ventas.

En 2025, el equilibrio entre aprovechar los drivers y administrar cuidadosamente los riesgos será esencial para que Entel mantenga un desempeño bursátil saludable. Inversionistas deberán estar atentos a las publicaciones trimestrales de resultados, noticias regulatorias y cualquier cambio estratégico en la estructura organizacional o alianzas tecnológicas.

La capacidad de la compañía para monetizar las inversiones realizadas en infraestructura y servicios digitales será determinante en su valoración de mercado.

El beneficio principal de las acciones es participar en el éxito de grandes empresas, pero el inversor debe estar dispuesto a aceptar el riesgo de mercado: a mayor potencial de ganancia, mayor es la posibilidad de enfrentar periodos de pérdidas temporales o permanentes.

El beneficio principal de las acciones es participar en el éxito de grandes empresas, pero el inversor debe estar dispuesto a aceptar el riesgo de mercado: a mayor potencial de ganancia, mayor es la posibilidad de enfrentar periodos de pérdidas temporales o permanentes.

Qué mirar hacia 2026

Para los inversionistas de mediano plazo, identificar señales tempranas sobre el futuro de Entel más allá de 2025 es clave. En particular, 2026 se perfila como un año en que muchas de las decisiones estratégicas tomadas durante el periodo 2023–2025 comenzarán a rendir frutos o enfrentar desafíos estructurales. Aquí detallamos algunos aspectos cruciales para monitorear:

1. Sustentabilidad de la expansión del 5G

Si bien en 2025 se espera un fuerte avance en cobertura y usuarios con teléfonos 5G, el reto de 2026 será monetizar efectivamente esta inversión. Esto implicará evaluar si las tarifas asociadas permiten rentabilizar el CAPEX y si existe una base de clientes dispuesta a pagar por servicios de mayor calidad, especialmente en regiones fuera de Santiago.

2. Evolución de la oferta digital

La demanda por servicios digitales empresariales y residenciales seguirá al alza, pero también lo hará la competencia. En 2026 se deberá observar si Entel consolida una posición relevante en segmentos TI, big data, ciberseguridad y cloud, o si los grandes proveedores internacionales capturan la mayor parte del mercado corporativo.

3. Políticas para inversionistas

Una clave para el próximo año será la política de dividendos de Entel. Si mantiene una distribución atractiva y sostenida, podría posicionarse entre las acciones más atractivas del IPSA para inversionistas de renta. Eventuales cambios deberán comunicarse con claridad para no perder confianza del mercado.

4. Impacto de la inteligencia artificial (IA)

La masificación de la IA en plataformas de atención, automatización de redes y optimización de datos será una tendencia clave. En 2026, los inversionistas observarán qué tan bien Entel ha internalizado estas herramientas para incrementar eficiencia operativa y reducir costos.

5. Riesgos geopolíticos y regulación

Chile enfrenta una etapa de redefinición en su institucionalidad política y económica. Cualquier cambio en las normativas del sector telecomunicaciones, configuraciones impositivas o incentivos a la inversión pueden incidir directa o indirectamente en el negocio de Entel en 2026.

Además, la evolución de la relación comercial entre Chile y mercados tecnológicos como Estados Unidos o China afectará la disponibilidad y precios del equipamiento tecnológico que Entel necesita para operar y expandirse.

6. Proyectos de diversificación regional

En Perú, Entel ha logrado consolidar una base relevante, y en 2026 podrían emerger nuevas oportunidades en otras geografías o mediante alianzas estratégicas. Cualquier paso hacia la regionalización ampliada será observado con atención por los analistas e inversionistas institucionales.

En conclusión, para 2026 los factores clave a tener en cuenta serán la rentabilidad efectiva de inversiones en tecnología, la estabilidad de políticas financieras, la capacidad de innovación frente a nuevos paradigmas tecnológicos y el contexto macroeconómico local e internacional. Preparar el portafolio requiere anticipación fundamentada en informes financieros, tendencias del sector tech y monitoreo constante de señales que puedan influir en el valor de mercado de Entel.

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